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NÚMERO 710 • 4 DE OCTUBRE DE 2020

Un nuevo directorio para una Nueva Evangelización

LÍNEAS PRINCIPALES DEL NUEVO DIRECTORIO DE CATEQUESIS

ENTREVISTA A YOLANDA GONZÁLEZ, DIRECTORA DE LA PRISIÓN PROVINCIAL

APUNTES

Programación para el clero

La Delegación para el Clero ha dado a conocer las actividades que se desarrollarán en el mes de octubre anunciando que del 2 al 4, habrá un nuevo Preseminario; el día 15, retiro mensual por arciprestazgos; y del 16 al 18, la Peregrinación a Guadalupe. Son algunas de las citas que ya se pueden consultar en diocesisdecordoba.es

500 aniversario de la torre parroquial de Pedroche

La torre parroquial de El Salvador de Pedroche celebra su 500 aniversario. Monseñor Demetrio Fernández presidirá la eucaristía el 3 de octubre, a las 19:00 horas. A continuación, a las 20:30 horas, habrá una ponencia en la Casa de la Cultura sobre la torre parroquial a cargo de Rafael Romero Misas, licenciado en geografía e historia.

Reunión de las delegaciones del sur

Las delegaciones de medios del sur de España se reunieron el pasado martes, 29 de septiembre, con el obispo responsable, monseñor Francisco Jesús Orozco, para abordar asuntos relacionados con la actualidad de cada una de las diócesis andaluzas, así como la programación para el nuevo curso pastoral.

La colecta del “Óbolo de San Pedro” será este domingo

En la solemnidad de San Pedro y San Pablo, el 29 de junio, se celebra anualmente la colecta eclesial del “Óbolo de San Pedro”, pero este año el Papa Francisco decidió aplazarla hasta el 4 de octubre, festividad de San Francisco de Asís y onomástica del Sumo Pontífice, a causa del Covid-19. El “Óbolo de San Pedro” es una colecta de la Iglesia universal cuyas ayudas económicas se destinan directamente al Papa para sostener los proyectos caritativos de la Santa Sede.

VOZ DEL PASTOR

Mes del Rosario

QUERIDOS HERMANOS Y HERMANAS:

El mes de octubre es el mes del Rosario, porque comienza con la fiesta de la Virgen del Rosario el día 7, instituida por la victoria de Lepanto (hace ahora 449 años). Otras posteriores victorias fueron atribuidas a María Santísima por el rezo del Santo Rosario, que la Virgen enseñó a Santo Domingo de Guzmán, y la Orden dominica se ha encargado de difundir por el mundo entero hasta universalizarlo. En las apariciones de la Virgen en Lourdes (1858) y en Fátima (1917), ha insistido en el rezo del santo Rosario. El papa León XIII escribió varias encíclicas sobre esta devoción mariana, san Juan Pablo II dice: “El rosario es mi oración preferida”. Y el papa Francisco ha repetido: “El rosario es la oración que acompaña siempre mi vida, también es la oración de los sencillos y de los santos”.

En muchas familias es costumbre rezar unidos el santo Rosario a diario. “Familia que reza unida, permanece unida”, decía el P. Peyton en su campaña por un mundo mejor. Es la oración que trenza la contemplación con la oración vocal, que tiene un gran contenido bíblico, que contempla los misterios de Cristo desde el corazón de María.

Es oración cristocéntrica y mariana al mismo tiempo, que repite el saludo del ángel a María a manera de la oración repetitiva oriental.

A muchos jóvenes, en mis años jóvenes y no tan jóvenes, los he iniciado en el rezo del Rosario. Y cuántos de ellos me lo han recordado y agradecido pasados los años. Es una oración que está al alcance de todos, es una oración sumamente sencilla, es una oración que enseña a orar a los humildes y sencillos. Benditas abuelitas que rezan y rezan el rosario, trayendo gracias abundantes para toda la Iglesia.

El Rosario se compone de cuatro grupos de misterios: los Misterios gozosos, referentes a la infancia de Jesús y que llenan de alegría el corazón. Los Misterios luminosos, que desgranan algunos momentos de la vida pública de Jesús. Los Misterios dolorosos, que contemplan la pasión y muerte del Señor. Y los Misterios gloriosos, que nos presentan la victoria de Cristo resucitado y la alegría irreversible de su resurrección.

Hay personas que rezan las cuatro partes cada día. Hay personas que rezan una parte. Hay quienes rezan solamente un misterio. Lo importante es conectar por medio de esta oración con Jesucristo, sintiendo cercana la intercesión de María nuestra madre, que nos enseña a orar.

También en nuestros días necesitamos abrir nuestro corazón a Dios y mantener esta oración sencilla, que alimenta nuestra fe. Son también muchas las necesidades de nuestros días por las que hemos de interceder continuamente, por las que hemos de rezar el Rosario. La salud de los enfermos, la justicia y la paz en el mundo, la situación actual de nuestra sociedad, las intenciones del Papa y las necesidades de la Iglesia, además de nuestras necesidades personales y familiares. Pero sobre todo, el alejamiento de Dios que trae un mal radical para tantas personas. La mayor carencia de la vida humana es carecer de Dios, y muchos de nuestros contemporáneos la padecen. Por eso hay que pedir insistentemente, sin cansarnos, para que muchos recuperen o descubran el sentido de Dios en sus vidas, y puedan disfrutar de los dones de Dios.

Al comienzo de curso en nuestra diócesis de Córdoba, pidamos al Señor por el Sínodo de los Jóvenes de Córdoba, que muchos jóvenes de nuestro entorno se encuentren con Dios, en su Iglesia; descubran a Cristo y la protección maternal de María. Octubre es el mes misionero, pidamos en este mes especialmente por la extensión del Evangelio por todo el mundo. Pidamos por los misioneros que se juegan la vida cada día, en medio de múltiples carencias. Que María santísima los proteja siempre. Pidamos por nuestra diócesis, por nuestros sacerdotes y seminaristas, por los que siguen de cerca al Señor en la vida consagrada, por las familias, los niños y los jóvenes. Pidamos especialmente por todos los que sufren por cualquier causa.

Recemos el Rosario cada día, nos hará mucho bien a nosotros y a los demás.

Recibid mi afecto y mi bendición:

+ Demetrio Fernández, obispo de Córdoba

EDUCAMOS ENTRE TODOS

ADOLFO ARIZA ARIZA. Delegado Diocesano de Catequesis

DIDÁCTICA DE LA ORACIÓN CRISTIANA

Los maestros de la oración

Los santos son los verdaderos maestros de la oración además de que su “intercesión es su más alto servicio al plan de Dios” por lo que “debemos y podemos rogarles que intercedan por nosotros y por el mundo entero” (CCE 2683). En su oración y el testimonio que de la misma nos han dejado en sus escritos se cumple el deseo de Pablo: “Comprender con todos los santos cuál es la anchura y la longitud, la altura y la profundidad, y conocer el amor de Cristo, que excede a todo conocimiento” (Ef 3, 18-19).

En este sentido es conveniente recordar el que para muchos constituiría uno de los gestos proféticos más clarividentes del siglo XX cuando el Papa Pablo VI, pocos años después del Concilio, dio el título de Doctoras de la Iglesia a Santa Teresa de Ávila y a Santa Catalina de Siena, en 1970. Y en 1997, Juan Pablo II daba el mismo título a Santa Teresa de Lisieux. Precisamente en Teresa de Lisieux podemos encontrar una de las claves esenciales para comprender el magisterio que sobre la oración ejercen los

santos cuando, al final de su autobiografía, habla de la misma “ciencia divina” que todos los santos, aun los más diversos, a lo largo de la historia de la Iglesia, han alcanzado de la misma fuente de la oración. En las últimas páginas del Manuscrito C, la santa comenta las palabras de la Esposa en el Cantar de los Cantares: “Llévame en pos de ti: ¡Corramos!” (Ct 1, 4), reencontrado espontáneamente un gran símbolo de la divinización, aquel del fuego y el hierro:

“Esta es mi oración. Yo pido a Jesús que me atraiga a las llamas de su amor, que me una tan íntimamente a él que sea él quien viva y quien actúe en mí. Siento que cuánto más abrase mi corazón el fuego del amor, con mayor fuerza diré ‘Atráeme’; y que cuanto más se acerquen las almas a mí (pobre trocito de hierro, si me alejase de la hoguera divina), más ligeras correrán tras los perfumes de su Amado. Porque un alma abrasada de amor no puede estarse inactiva (…) Así lo entendieron todos los santos, y más especialmente los que han llenado el universo con la luz de la doctrina evangélica. ¿No fue en la oración donde san Pablo, san Agustín, san Juan de la Cruz, santo Tomás de Aquino, san Francisco, santo Domingo y tantos otros amigos ilustres de Dios bebieron aquella ciencia divina que cautivaba a los más grandes genios? Un sabio decía: ‘Dadme una palanca, un punto de apoyo y levantaré el mundo’.

Lo que Arquímedes no pudo lograr, porque su petición no se dirigía a Dios y porque lo hacía desde un punto de vista material, los santos lo lograron en toda su plenitud. El todopoderoso les dio un punto de apoyo: Él mismo, Él solo. Y una palanca: la oración, que abrasa con fuego de amor. Y así levantaron el mundo. Y así lo siguen levantando los santos que aún militan en la tierra. Y así lo seguirán levantando hasta el fin del mundo los santos que vendrán”.

Adentrarse en el riquísimo magisterio de los santos sobre la oración ayudará a seguir percibiendo con sorpresa aquella misma maravilla de la que ya en su momento habló la constitución dogmatica del Concilio Vaticano II Lumen gentium: “El resultado ha sido una especie de árbol en el campo de Dios, maravilloso y lleno de ramas, a partir de una semilla puesta por Dios. Han crecido, en efecto, diversas formas de vida, solitaria o comunitaria, y diversas familias religiosas que se desarrollan para el progreso de sus miembros y para el bien de todo el Cuerpo de Cristo” (LG 43).

Adolfo Ariza Ariza
Delegado Diocesano de Catequesis. Director y profesor del ISCCRR Beata Victoria Díez

ELABORADO UN DOCUMENTO DIOCESANO CON LAS LÍNEAS PRINCIPALES DEL NUEVO DIRECTORIO DE CATEQUESIS

Un nuevo directorio para una
NUEVA EVANGELIZACIÓN

TEMA DE LA SEMANA

El Nuevo Directorio de Catequesis quiere ser un instrumento que ayude a repensar la catequesis ante la nueva cultura digital. Más allá de la preparación para los sacramentos, la catequesis capacita a la persona para anunciar a Cristo en el mundo de hoy y la Nueva Evangelización depende de ella. El nuevo lenguaje de los jóvenes ha impulsado una revisión de modos de acercamiento a la nueva cultura digital para infundir en los jóvenes el deseo de encontrar a Jesús personalmente. El nuevo directorio es una luz que muestra a Cristo, da a conocer la fe con alegría y entusiasmo, y quiere generar la certeza entre los jóvenes de que las comunidades parroquiales de hoy los esperan para proyectar su futuro. Para todos, como bautizados, está llamado a ser una herramienta de evangelización.

VIVIR LA LITURGIA

La participación que desea la Iglesia

JAVIER SÁNCHEZ MARTÍNEZ
Miembro de la Delegación diocesana de Liturgia

La Iglesia marcó directrices concretas sobre la participación y cómo realizarla.

“Los textos y los ritos se han de ordenar de manera que expresen con mayor claridad las cosas santas que significan y, en lo posible, el pueblo cristiano pueda comprenderlas fácilmente y participar en ellas por medio de una celebración plena, activa y comunitaria” (SC 21); han de participar “consciente, activa y fructuosamente” (SC 11).

Por eso hay que promover la educación litúrgica: “La santa madre Iglesia desea ardientemente que se lleve a todos los fieles a aquella participación plena, consciente y activa en las celebraciones litúrgicas” (SC 14), “interna y externa” (SC 19).

La participación plena tiene un fin: beber plenamente el espíritu cristiano; para ello la liturgia debe ser el manantial de espiritualidad: “hay que tener muy en cuenta esta plena y activa participación de todo el pueblo, porque es la fuente primaria y necesaria de donde han de beber los fieles el espíritu verdaderamente cristiano” (SC 14).

Esta participación activa incluye diversos elementos: “Para promover la participación activa se fomentarán las aclamaciones del pueblo, las

respuestas, la salmodia, las antífonas, los cantos y también las acciones o gestos y posturas corporales. Guárdese, además, a su debido tiempo, un silencio sagrado” (SC 30).

La piedad (la devoción) es un don necesario: “piadosa y activa participación de los fieles” (SC 50) pues se tratan cosas santas.

Y el mayor grado de participación es poder comulgar:

“Se recomienda especialmente la participación más perfecta en la misa, la cual consiste en que los fieles, después de la comunión del sacerdote, reciban del mismo sacrificio el Cuerpo del Señor” (SC 55).

Esta participación santifica las almas: “La Iglesia, con solícito cuidado, procura que los cristianos no asistan a este misterio de fe como extraños y mudos espectadores, sino que comprendiéndolo bien a través de los ritos y oraciones, participen conscientes, piadosa y activamente en la acción sagrada, sean instruidos con la palabra de Dios, se fortalezcan en la mesa del Cuerpo del Señor, den gracias a Dios, aprendan a ofrecerse a sí mismos al ofrecer la hostia inmaculada no sólo por manos del sacerdote, sino juntamente con él, se perfeccionen día a día por Cristo mediador en la unión con Dios y entre sí, para que, finalmente, Dios sea todo en todos” (SC 48).

Participar: rezar, responder, cantar, arrodillarse, escuchar, ofrecerse, comulgar, adorar, guardar silencio… ¡con fe, amor y atención!

¿Sabías que...

conviene guardar silencio antes de Misa en la iglesia y en la misma sacristía?

Es de alabar que se guarde silencio, ya antes de la misma celebración: en la iglesia, en la sacristía, y en los lugares más próximos; de esta forma todos podrán disponerse adecuada y devotamente a las acciones sagradas (cf. OGMR 45).

LIBRERÍA DIOCESANA

La práctica de la humildad

DOS CARTAS DE TERESA DE LISIEUX

Gioacchino Pecci (León XIII)
Ediciones RIALP • Colección Neblí

Coincidiendo con la fiesta de Santa Teresa de Lisieux, encontramos un libro que profundiza en la figura de esta Santa de la mano de Gioacchino Pecci, que sería luego el Papa León XIII.

Se trata de una obra de carácter ascético, que ofrece un conjunto de orientaciones para vivir y adquirir, practicándola, la virtud de la humildad.

El autor se dirige de modo más concreto a los seminaristas de Perugia, pero a la vez parece hablar personalmente a cada lector. Incluye además en el interior de la obra dos Cartas de Teresa de Lisieux. Ambas se hallan en Historia de un alma, y son dos hermosas muestras de la humildad y la total confianza en Dios que Teresa mostró siempre.

En definitiva, el Papa León XIII habla con intensidad y convicción de la necesidad de practicar la humildad, porque es fundamento de la perfección cristiana. Describe la humildad como «esta perla preciosa, que es la prenda más segura de santidad».

El libro está disponible en la Librería Diocesana. Puede realizar su pedido a través del correo electrónico libreria@diocesisdecordoba.es o a través de WhatsApp 655 156 557.

AL TRASLUZ

ANTONIO GIL. Sacerdote

Los tres carismas de las jerónimas

El dia 30 de septiembre se ha cerrado el XVI Centenario de la muerte de san Jerónimo, con una misa solemne oficiada por monseñor Alberto González Chaves, Vicario Episcopal para la Vida Consagrada, en el convento de Santa Marta, de nuestra capital. El programa de actos preparado por la comunidad de religiosas jerónimas para este Centenario se abrió el año pasado con un Pregón, que tuve el honor de pronunciar. Pero, a causa de la pandemia, sólo se han realizado algunas conferencias: la del Vicario de Religiosas, sobre la vida de san Jerónimo; la de Dámaso Caminero Tapiador, Hermano de las Fraternidades Jerónimas; la de Antonio Varo, sobre la comunidad de Santa Marta; y la de Pablo Lora, quien habló de la figura de santa Paula. Los demás actos fueron suprimidos.

En el momento de la clausura de este Centenario, la comunidad de religiosas jerónimas quieren expresar lo que ha supuesto para ellas, en palabras de la Madre Maria Gracia Martin: «La contemplación de la vida de nuestro fundador, doctor de la Iglesia y «un auténtico campeón del ascetismo», como lo ha denominado Juan Luis Vázquez. Asimismo, el centenario ha sido para nosotras una constante renovación de nuestros tres carismas: El estudio de las Sagradas Escrituras, la celebración solemne de la Liturgia y la hospitalidad. Hemos percibido tambien, como comunidad religiosa, la fuerza que posee la Orden Jerónima para llenar nuestras vidas».

Nos quedarán siempre de san Jerónimo, aquellas palabras que escuchó de labios de Jesús, una noche de Navidad: «Dame tus pecados para perdonártelos». Era el regalo preferido que buscaba el Señor en el corazón de Jerónimo.

FAMILIA DE FAMILIAS

FAMILIA HERRADOR CAMPOS

«Transmitimos la fe a nuestros hijos como algo natural y necesario en nuestro día a día»

David Herrador y Paqui Campos, padres de dos hijos, pertenecen a la parroquia San Francisco y San Rodrigo de Cabra

¿Cuáles son los pilares de vuestra convivencia familiar?

El amor y el respeto que nos tenemos mutuamente y hacia nuestros hijos. Saber escuchar y ser escuchado.

¿Qué resulta más complicado en la educación de los hijos en este momento social?

En esta sociedad, que principalmente prima lo material, es difícil, aunque no imposible, inculcar a nuestros hijos que hay momentos y experiencias que van más allá de lo tangible y transmitirles los valores como el respeto, el amor al prójimo, la generosidad, etc…  que años atrás nos transmitieron nuestros padres en  una sociedad muy distinta a la actual.

¿Qué instrumentos tiene la familia de hoy para manifestarse cristiana?

Creemos que tiene muchos y variados, para empezar la primera manifestación y la más primitiva es en casa, en la iglesia doméstica, de la que parte todo, en la que todo comienza.

A partir de ahí, cada familia tiene la opción de su parroquia, asistiendo a misa y formando parte de la propia comunidad  dentro de los diversos equipos de trabajo que la conforman, ya sea como catequista, Cáritas, formando parte de las hermandades etc…

La transmisión de la fe a los hijos es un reto para todos, ¿cómo lo hacéis vosotros?

Nosotros lo hacemos de la forma más natural posible, para que ellos no lo vean como una obligación, sino como algo natural y necesario en nuestro día a día. Desde que Marcos, nuestro hijo mayor, era un bebé rezamos todas las noches con él, hasta que un día, nos pidió rezar una oración distinta que le habían enseñado en el colegio, (Colegio San José), y más tarde se incorporó Elena, nuestra hija pequeña, la cual también nos pidió que rezáramos otra oración que a ella le habían enseñado también en el cole.

Además procuramos participar en las actividades de nuestra parroquia y en su momento matriculamos a nuestros hijos en el ya mencionado Colegio San José de las Madres Escolapias.

¿Cuál es vuestra parroquia?, habladnos de vuestra vida en comunidad.

Nuestra parroquia es San Francisco y San Rodrigo, ubicada en el Barrio de Nuestra Señora de la Sierra, donde nos hemos criado, aunque en la actualidad no residamos en él.  Nuestra vida en comunidad comienza desde pequeños, en las catequesis de preparación para la Primera Comunión y posteriormente en catequesis de preparación a la confirmación. Años más tarde, allá por el 1999, comenzamos a formar parte de la Junta de Gobierno de la Real Hermandad del Stmo. Cristo de la Sentencia, en sus burlas y Coronación de Espinas y Ntra. Sra. la Stma. Virgen de la Paz, en la cual hasta el día de hoy hemos desempeñado distintos cargos. Nuestros hijos ya han comenzado sus catequesis, recibiendo nuestro hijo mayor, Marcos, el pasado 12 de septiembre, su Primera Comunión. Por segundo año consecutivo y tras propuesta del por aquel entonces párroco D. Manuel Rodríguez Adame, formamos parte del equipo de formación de los cursos prematrimoniales y este año, (d.m.) nos iniciaremos como catequistas de nuestra parroquia.

¿Cómo imagináis la Iglesia del futuro?

La imaginamos próxima, abierta y revitalizada, con la savia nueva que está llegando con fuerza, imprimiendo a las distintas comunidades de una dinámica que augura grandes y buenos frutos, cuando esa juventud, esos proyectos de futuro, se hayan convertido en verdaderas realidades.

Fecha y lugar del matrimonio

1 de mayo de 2004 Iglesia de San Francisco y San Rodrigo de Cabra

Número de hijos y edades

2, Marcos de 9 años y Elena de 7 años

Un momento de vuestra historia familiar

El nacimiento de nuestros hijos.

Una actividad que comparte la familia en su tiempo libre

Estar en casa juntos.

Qué cosas no dejáis de hacer juntos cada día

Hablar de lo que nos ha acontecido el día.

Qué lugar ocupan los abuelos en casa

Un lugar muy importante, ya que, nosotros somos lo que somos gracias a ellos.

¿Rezáis por algún sacerdote?

Rezamos por D. Francisco Ramírez Chamizo, que ha sido el párroco de nuestra comunidad, durante más de 50 años, siendo él quien creó la feligresía de nuestro barrio, nos casó y bautizó a nuestros hijos. Le tenemos mucho cariño.  Don Francisco siempre al finalizar sus misas nos daba a los padres y madres una recomendación “Hablad a vuestros hijos de Dios y hablad a Dios de vuestros hijos”, recomendación que seguimos y ponemos en práctica con nuestros hijos.