Con las mochilas cargadas de ilusión y en busca de un encuentro personal con Dios, estos jóvenes vivieron unos días intensos acompañados por numerosos sacerdotes y por el obispo de Córdoba, monseñor Demetrio Fernández, quien el domingo, 18 de septiembre, en la misa dominical de la Catedral, hizo entrega de la Compostela a cada uno de los peregrinos.
En su homilía, el pastor de la Diócesis recordó que la peregrinación es una parábola de la propia vida en la que hay cansancio y dificultades. Pero «en los demás que iban a vuestro lado habéis encontrado la ayuda», les comentó el Obispo.
Asimismo, les invitó a experimentar la grandeza de la fe tanto en la próxima peregrinación de jóvenes a Guadalupe, como en la Jornada Mundial de la Juventud de Lisboa 2023, una ocasión para poner a punto la fe y compartirla con jóvenes de todos los rincones del mundo en los que la Iglesia siempre está presente.