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Se abre la Fase Diocesana del Sínodo de los Obispos

El obispo de Córdoba, monseñor Demetrio Fernández, celebró la misa de apertura en la Santa Iglesia Catedral el pasado domingo, 17 de octubre

La diócesis de Córdoba abrió la Fase Diocesana del Sínodo de los Obispos con la celebración de la santa misa, en la Catedral de Córdoba, presidida por el Obispo, monseñor Demetrio Fernández. Una etapa para “encontrar, escuchar y discernir”, tal y como planteó el Papa Francisco en la misa de apertura del Sínodo de los Obispos 2021.

“Se trata de caminar juntos en la misma dirección, de ponernos a la escucha de las esperanzas de cada Iglesia, pueblo o nación”, explicó el Santo Padre exhortando a los obispos a abrir la primera de las tres fases que el proceso sinodal atravesará antes de llegar a la reunión de los padres sinodales en la XVI Asamblea General del Sínodo en Roma, en octubre de 2023.

En esta Fase Diocesana, que se centrará en las diócesis y sus comunidades cristianas (parroquias, movimientos, universidades, congregaciones, grupos de fieles y demás realidades), el obispo de Córdoba pidió trabajar unidos y en comunión. “Que el mes misionero nos haga entender este mensaje de Jesucristo y que el Sínodo que comenzamos en las diócesis, “Por una Iglesia sinodal”, nos vaya preparando para participar todos en la construcción de la Iglesia y en el testimonio que la Iglesia está llamada a dar en el mundo”. La diócesis de Córdoba ya tiene una fecha, el 26 de marzo, para una asamblea sinodal de laicos, sacerdotes y religiosos, anunció el Obispo, “donde pongamos en común las pautas que nos van dando en este camino común para hacer q la Iglesia sea cada vez más un signo visible”.

En octubre de 2023, se celebrará el Sínodo de los Obispos, una reunión de una representación de los Obispos del mundo entero, donde se reflexionará sobre la importancia de que toda la Iglesia camine unida.

La celebración culminó con la oración del Sínodo, “Adsumus Sancte Spiritus”, una oración al Espíritu Santo que se utilizará durante el proceso sinodal y que ha sido diseñada específicamente para el camino sinodal de la Iglesia de 2021 a 2023, atribuida a san Isidoro de Sevilla y utilizada tradicionalmente en concilios y sínodos.

Dos fases más

La segunda fase tendrá como protagonista a las Conferencias Episcopales y a los Sínodos de las Iglesias Orientales. En esa fase se recopilarán todas las aportaciones de la Fase Diocesana y se elaborará una síntesis como base de los trabajos del Encuentro Presinodal.

Del Encuentro Presinodal saldrá un primer Instrumentum Laboris, que guiará el proceso sinodal en su tercera fase, la Fase Continental. En ella, la Iglesia se reunirá en encuentros continentales, siete encuentros, uno por continente, y se redactarán siete Documentos Finales, de donde saldrá un segundo y definitivo Instrumentum Laboris.

Ese segundo instrumento de trabajo será el que guíe los debates de los Padres Sinodales en la Asamblea de octubre de 2023. Por último, los Padres Sinodales, en la conclusión de sus discusiones, consensuarán un Documento Final que le será entregado al Papa Francisco.

Acción de gracias por los Beatos mártires

La celebración en el templo catedralicio fue además una acción de gracias por los Beatos mártires Juan Elías Medina y 126 Compañeros, solemnemente beatificados el sábado, en la Catedral.

En la homilía, el pastor de la Diócesis se mostró agradecido con la solemne celebración vivida en la Catedral de Córdoba, “experimentamos todos lo que hoy canta el Salmo: Que tu misericordia Señor venga sobre nosotros como lo esperamos de ti”. Y añadió que “en los mártires y en nosotros experimentamos la misericordia de Dios”. “Somos de barro, frágiles, débiles e incluso palpamos nuestro propio pecado, pero Dios tiene misericordia de nosotros y quiere llevarnos hasta la plenitud de la vida cristiana, la santidad”, afirmó asegurando que “el camino siempre es Jesucristo”.

Asimismo, pidió que el testimonio de nuestros mártires “nos ayude a seguir esa estela de santidad que ellos han dejado en la Iglesia, en nuestras familias y en nuestros ambientes”.

Al concluir la santa misa, se entonó el himno dedicado a los Beatos mártires “La Victoria del Amor”.